El crecimiento de la población mundial y los avances tecnológicos nos obligan a pensar y repensar soluciones de habitabilidad sostenibles para cuidar nuestra vida y la del planeta.
Los centros urbanos son cada día más demandados, lo cual supone para las ciudades el desafiao de poder acoger a todas las personas que lo requieran. Durante los últimos 100 años, la solución para optimizar el espacio ha sido la construcción de edificios, que por cierto cada vez son más altos. Naturalmente, este movimiento social ha causado muchísimos temas colaterales por resolver, como es el desplazamiento vertical para que cada persona pueda llegar a su destino.
Los ascensores han ido evolucionando muchísimo con el paso de los años, las cabinas son mas sofisticadas, los motores consumen menos energía, las piezas son mas duraderas. La industria del ascensor se encuentra en constante movimiento, ya sea desarrollando cambios de paradigmas como el ascensor MULTI que se desplazará horizontal o verticalmente, como también intentando ganar eficiencia en los mecanismo actuales.
Un elemento clave que suele restringir la altura de un edificio es la distancia que un ascensor puede recorrer con seguridad teniendo en cuenta el peso y el grosor del cable de acero que sostiene su cabina.
Las empresas vanguardistas del sector se plantearon la posibilidad de sustituir los cables de acero de los mecanismos de los ascensores por otros realizados con compuestos de fibra de carbono, lo cual ha sido totalmente valido, pero el diseño requería cierto desarrollo para producir un cable que cumpliera los estrictos requisitos del sector.
Los ingenieros de investigación y desarrollo (I+D) trabajaron para desarrollar un concepto que incorpora perfiles planos de carbono encapsulados en un plástico flexible para formar una correa. Se elaboraron prototipos del cable para ascensores antes de someterlos a pruebas rigurosas y se patentó el resultado final con el nombre de UltraRope.
UltraRope
UltraRope pesa aproximadamente siete veces menos que un cable de acero tradicional para ascensores. En este sentido, mejora la eficiencia energética en todo el proceso mecánico del ascensor. Además, es más resistente que los cables de acero tradicionales y necesita un menor mantenimiento, dado su menor desgaste y abrasión.
De esta manera, con los cables de materiales compuestos puede reducirse hasta un 60% el movimiento de la masa del ascensor con una altura de desplazamiento de solo 500 metros. Así se consigue reducir un 15% el consumo energético y se abren nuevas oportunidades para aumentar la altura del ascensor.
Si se incrementa la altura de desplazamiento del ascensor a 800 metros, la masa en movimiento se reduce un 90% y el consumo energético disminuye un 45%. Estos datos demuestran la sostenibilidad general y los beneficios en materia de consumo de energía del nuevo desarrollo.
Más ventajas
Igualmente, UltraRope es menos sensible a las frecuencias de oscilación que pueden causar los vientos fuertes en edificios elevados.
Por otra parte, el nuevo sistema de cable con materiales compuestos tiene además el doble de vida útil que un cable de acero convencional. Asimismo, requiere un menor mantenimiento y este resulta más sencillo.